martes, 4 de diciembre de 2012

Caso Llorente

Hoy Fernando Llorente ha reafirmado que el próximo 30 de junio, al finalizar su contrato con el Athlétic Club, buscará un nuevo destino para progresar futbolísticamente.

Personalmente, por muchas vueltas que le doy, no soy capaz de comprender los motivos por los que Llorente sigue en el club bilbaíno, cuando ya había comunicado este verano su intención de marcharse del Athlétic. Sin duda los 20 millones de euros que se llegaron a ofrecer por él, no eran nada atractivos en comparación con dejar salir gratis al jugador el próximo mes de junio.



Gracias a la inteligencia de Josu Urrutia y del resto de su junta directiva, el Athlétic no solo no recibirá ninguna suma económica, sino que tiene en el banquillo a un jugador insignia del que no estamos pudiendo disfrutar. Además, dada su situación, éste no hace más que generar conflictos con el entrenador y desviar la atención de sus compañeros, lo cual repercute de manera muy negativa en el rendimiento de su equipo, y sin duda, es uno de los motivos por los cuales el Athlétic ha pegado semejante bajón esta temporada. 




El Athlétic ha ido más lejos todavía. Su manifiesta incompetencia para manejar este caso, ha dado lugar a que el llamado "Rey León" haya pasado de ser un ídolo incuestionable en San Mamés, a ser el enemigo público número uno. De hecho, las ovaciones a las que nos tenía acostumbrados el "9" que con sus goles llevase el año pasado al Athlétic a las finales de Europa League y Copa del Rey, se convierten ahora en pitos e insultos contra un jugador que siempre ha luchado hasta la extenuación por defender los colores de su equipo.












Uno de los supuestos motivos que tratan de explicar este odio irracional hacia un jugador ejemplar, es el supuesto interés económico del mismo en abandonar el Athlétic. No obstante, el propio Llorente ha desmentido en varias ocasiones que sea este el motivo de su adiós. No creo que sea descabellado pensar que un jugador de fútbol tenga ambiciones más allá de las puramente económicas.


Por la política de club del Athlétic, que única y exclusivamente ficha jugadores de procedencia u origen vasco, es difícil que estas ambiciones de un campeón de Europa y del Mundial con España, no lo olvidemos, no puedan ser saciadas. Pues, si bien esta gestión tan particular de los "leones" es un motivo de orgullo, no podemos negar que supone a la vez unas limitaciones a nivel competitivo que difícilmente pueden ser subsanadas.

Visto esto, no me parece disparatado que Fernando Llorente, con un excelente palmarés internacional, quiera emigrar a algún otro equipo que le permita jugar la Champions League (la mejor y más prestigiosa competición a nivel de clubes, la cual no ha disputado, ni creo que pueda nunca con el Athlétic), así como optar a ganar títulos, lo cual con su actual club se me antoja complicado.


El Athlétic tendrá la oportunidad de medio enmendar su error en enero, cuando se abre nuevamente el período de traspasos, y traspasar al jugador (aunque por bastante menos dinero del que habría obtenido en verano). Sin embargo, conocida la cabezonería de la que hace gala Urrutia, dudo mucho que esto suceda. 

Llorente se irá pues en verano por la puerta de atrás, cuando este jugador habría merecido el mayor de los homenajes posible en "La Catedral". Vayas donde vayas, mucha suerte Fernando.  


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