La misión de Toni Kroos

Toni Kroos acaba de ser presentado como nuevo jugador del Real Madrid. El futbolista alemán procedente del Bayern Múnich llega tras un desembolso de 25 millones de €, una auténtica ganga para los escandalosos precios que maneja el mercado futbolístico últimamente. A sus 24 años, Kroos lo ha ganado todo con el Bayern y viene de ganar el Mundial con Alemania. Ahora emprenderá una nueva etapa en el Real Madrid con una misión: hacer olvidar a Xabi Alonso.

Tal cometido iba a recaer en principio sobre Asier Illarramendi, pero su mala adaptación al club blanco ha hecho que muchos pongan en duda el gran futuro que prometía en la Real Sociedad. Con Xabi Alonso en sus últimas (lleva ya dos temporadas con bajones físicos considerables en la recta final), el Madrid ha querido asegurarse un recambio de garantías, y el elegido ha sido Toni Kroos. 

El mediocentro alemán muestra características similares a las de Xabi: buen pase, buena visión de juego… y quizás algo más de llegada que el tolosarra sin alcanzar, eso sí, el nivel táctico del español. Kroos debe aprender a ser el motor incansable que necesita el Real Madrid. Si lo consigue le espera un gran futuro como merengue. No es fácil reemplazar a Xabi Alonso, cuyas ausencias envolvían el centro del campo blanco en un caos irresoluble, no obstante, talento no le falta al alemán.

Esto es el Real Madrid, la presión es máxima y nunca se sabe cómo responderá el jugador, pero el fichaje es acertado. La incorporación de Kroos obligará a Casemiro a huir del superpoblado medio campo blanco y a hacer las maletas. Y Khedira podría tener también las horas contadas en el Madrid, pues su destino parece ligado al Arsenal inglés. Ahora los madridistas deben concentrarse en su próximo objetivo: resolver de una vez por todas el debate de la portería. 

Alemania conquista el mundo en Brasil

Pocos partidos son comparables a lo que supone la final de un Mundial. Nervios, emoción y la sensación de tener ante sí una oportunidad irrepetible. Alemanes y argentinos experimentaron ayer en Maracaná lo que españoles y holandeses sintieron hace cuatro años en Sudáfrica. Ganó quien más lo había merecido a lo largo del Mundial: Alemania, eso sí, con más sufrimiento del previsto inicialmente. Hizo falta llegar a la prórroga para que Götze marcase el gol que haría campeón a los germanos.

Argentina no fue Brasil y supo competir contra Alemania. Su presión efectiva y su velocidad metieron la duda en el cuerpo de los alemanes. El dominio inicial de Alemania fue contestado por una clarísima ocasión de Higuaín que erró inexplicablemente. Uno de esos fallos que lo perseguirán durante toda su vida… La más clara de los europeos en la primera mitad la tuvo Höwedes, que envió un centro de Kroos al poste con un remate de cabeza en plancha. Un par de arrancadas de Messi al comienzo del choque habían encendido todas las alarmas alemanas, no obstante, el crack argentino se fue diluyendo poco a poco hasta parecer un mero espectador del juego.

En la segunda mitad Argentina pasó a jugar con dos puntas, sacrificando a Lavezzi (de los mejores del primer tiempo) y alineando al "Kun" Agüero junto a Higuaín. Messi se situó en la mediapunta por detrás de ambos. Los sudamericanos mejoraron y fueron superiores a su rival en la segunda parte. La defensa alemana sufrió más e incluso los argentinos dominaron la pelota durante varios tramos de los segundos 45 minutos. Ni unos ni otros consiguieron marcar. Era tiempo de prórroga.

El tiempo extra decidiría quién se proclamaría campeón del mundo, si no, los penaltis harían lo propio. Las miradas de millones de personas se centraron en Lionel Messi, jugador de talento estratosférico que ya ha resuelto él solo en innumerables ocasiones partidos con el F.C. Barcelona. El cuatro veces Balón de Oro parecía haberse estado reservando, esperando su momento para hacer la jugada que le terminase de encumbrar a lo más alto de los altares del fútbol. Sin embargo, la magia de Messi no llegó. Fue Götze, que había entrado desde el banquillo, quien marcó el único tanto de la final. En el 112', un control con el pecho dentro del área y un remate con la pierna izquierda según caía, permitieron al mediapunta del Bayern Múnich escribir su nombre en la historia del fútbol alemán. Messi tuvo en sus botas el empate en un libre directo en el minuto 120, pero su disparo se marchó a las nubes de Río de Janeiro. Alemania, campeona del mundo.

Terminado el encuentro y en plena celebración alemana era el momento de los premios individuales: Guante de Oro, Neuer; Bota de Oro, James Rodríguez; Mejor Jugador Joven: Pogba… La sorpresa, injusticia y el sinsentido del Mundial tuvo lugar a la hora de designar al Balón de Oro de Brasil 2014. El elegido… Leo Messi. Mal Mundial del argentino que sólo estuvo a la altura contra Nigeria y contra Irán, desparecido en octavos, cuartos, semifinal y final… ¡y Balón de Oro! Incluso Messi es consciente de que no se lo merecía. En fin, algún cante tenía que dar la FIFA para estar tranquila… 

Fallece Alfredo Di Stéfano

Hace apenas unos momentos se ha dado a conocer la noticia de la muerte de Alfredo Di Stéfano. El Presidente de Honor del Real Madrid, considerado uno de los mejores futbolistas de la historia, no ha superado la parada cardíaca que sufrió hace dos días y nos ha dicho adiós a los 88 años de edad.

Di Stéfano, héroe y leyenda de su Real Madrid, hace tiempo que colocó su nombre en la historia del fútbol con actuaciones a la altura de muy pocos seres humanos. De él destacaban los afortunados que lo vieron jugar su calidad y su fuerte carácter sobre el terreno de juego, su ambición y su eterna ansia por la victoria; en otras palabras, los tan famosos valores del madridismo defendidos por Florentino Pérez y que tantos y tantos jugadores han seguido tras Di Stéfano.

Lo de Alfredo era magia en blanco y negro. Su celebérrimo gol de tacón, sus increíbles números y regístros, TODO. Sólo unos pocos como Pelé, Maradona, Cruyff o Zidane tienen la fortuna de poder compararse con él, uno de los más grandes que ha dado el deporte rey. La "Saeta Rubia": ídolo de masas en su juventud, entrenador en su madurez y respetado "sabio del fútbol" en su vejez. Siempre fue defensor de la cantera y enamorado de aquéllos que, como él, se dejaban la piel en la "cancha".

Alfredo Di Stéfano es sinónimo de Real Madrid. Su clase y liderazgo auparon al club blanco a la grandeza y es que, con Di Stéfano a la cabeza, los merengues se alzaron con las cinco primeras Copas de Europa que se disputaron (la actual Champions League), una de las claves por las que el Real Madrid sería reconocido internacionalmente como el mejor equipo del siglo XX.

A las ya mencionadas 5 Copas de Europa debemos añadir: 13 ligas (8 españolas, 3 colombianas y 2 argentinas); 2 copas (una española y una colombiana); y otros cinco trofeos internacionales (a destacar una Copa América y una Intercontinental). Además fue: máximo goleador de la Primera División de Argentina; máximo goleador de la Liga Colombiana en dos ocasiones; cinco veces Pichichi; dos, Balón de Oro… En 1989 le fue concedido el Súper Balón de Oro como mejor jugador de fútbol hasta el momento por la revista France Football (motivo del treinta aniversario de la misma), imponiéndose a Johan Cruyff y a Michel Platini. 

Como futbolista profesional alcanzó la espectacular cifra de 498 goles en 677 partidos oficiales. En el Real Madrid, sus 307 goles le dejan como segundo máximo goleador histórico del club (sólo superado por los 323 de Raúl). Como entrenador no brilló de la misma manera que con el balón en los pies, pero acabó con un palmarés de 2 ligas argentinas, 1 Copa de Argentina, 1 Liga de España, 1 Supercopa de España y 1 Recopa.

Desde aquí le dedicó un recuerdo más a Alfredo Di Stéfano; no será el último. "Saeta Rubia", hasta siempre.