domingo, 30 de agosto de 2015

Superlativo James y sobresaliente Real Madrid en el Bernabéu


Los madridistas golearon al Betis en el primer partido oficial en casa de la temporada con el colombiano como protagonista absoluto



El Real Madrid acalló todas las críticas sobre su escasa capacidad de gol encajándole una manita al Betis. El 5-0 sirvió como carta de presentación ante una afición que no las tenía todas consigo antes del comienzo del encuentro. James Rodríguez fue el mejor de un equipo que, esta vez sí, funcionó a las mil maravillas. Los verdiblancos no opusieron resistencia alguna al ciclón que se les vino encima. El conjunto dirigido por Pepe Mel completó noventa minutos muy por debajo del nivel exigido, a merced siempre de los pupilos de Rafa Benítez.

El once madridista presentó como novedades las inclusiones de James Rodríguez y de Karim Benzema, recuperado ya de su lesión muscular. Ambos supusieron un gran salto de calidad para el equipo y fueron claves en las vertiginosas combinaciones blancas. El francés, siempre cuestionado, rindió al Bernabéu a sus pies con paredes de PlayStation y la sublime calidad que acompaña cada actuación suya. El colombiano se convirtió en el líder del equipo y fue decisivo con dos golazos y una asistencia marca de la casa. El Betis, errático desde el pitido inicial, concedió demasiadas facilidades en una de sus peores visitas al Bernabéu.


Sin duda, si para alguien era especial el partido de ayer era para
Adán. El portero volvía a la que fue su casa con una camiseta diferente y con muchísimas ganas de reivindicarse. Completó una mejor actuación de las que se le recordaban en el Madrid, pero no dejó de encajar cinco tantos a manos de unos ex compañeros que no tuvieron piedad alguna. Consiguió, eso sí, dejar otro partido sin anotar a Cristiano Ronaldo, que fue quien más lo intentó y contra quien más acierto tuvo Adán.


El Betis vio desde el principio como el Madrid le superaba en todos los aspectos. No habían transcurrido ni dos minutos cuando James regaló un balón a la cabeza de Bale para que el galés abriese la lata. Los primeros veinte minutos de los locales fueron puro espectáculo. Muy buen juego ante un rival pasmado que no sabía qué hacer. El resto de la primera mitad fue más de control que otra cosa pero al filo del descanso, James logró el golazo de la noche con un libre directo escorado en la banda. Cuando todo el mundo esperaba el centro al área, el colombiano chutó al palo largo del portero y tras pegar el cuero en el poste, éste se alojó en la escuadra contraria.


Pepe Mel quiso salir a por todas en la reanudación introduciendo a Jorge Molina (delantero) por Molinero (defensa), pero de poco le valió su osadía. El principio de la segunda mitad fue clavado al de la primera y, sin haber soltado la posesión, el Madrid hizo el tercero tras una jugada de equipo increíble. La combinación final entre Danilo, Bale y Benzema terminó con el cuero en el fondo de las mallas, cabezazo del francés mediante. No se vislumbró ni un solo síntoma de reacción en el Betis. Sólo N'Diaye con alguna galopada daba sensación de querer intentarlo.

Con el Madrid volcado arriba, un mal disparo de Kroos se convirtió en un pase a James, que controló y se inventó una chilena para marcar el cuarto de la noche. Ramos trató de imitar a su compañero con otra acrobacia que se estampó en el palo y, por si fuese poco, apareció Keylor Navas. El costarricense también se quería divertir y evitó que el Betis se llevase a Sevilla el famoso gol de la honra. Primero, con unos reflejos felinos le arrebató de las botas a Rubén Castro una pelota que ya se cantaba como gol y después, también a Rubén Castro, le detuvo un penalti bloqueando y atrapando el balón. Aún querrá traer a De Gea alguno



Fue una noche redonda para el madridismo y Gareth Bale cerró el marcador con un disparo lejano ante el que nada pudo hacer Adán. Con esta contundente victoria el Madrid recupera sensaciones y confianza pero no deja de tener dos puntos menos que sus rivales tras el tropiezo en Gijón. 



Ficha del partido:

Alineaciones:
Real Madrid (4-2-3-1): Keylor Navas; Danilo, Varane, Sergio Ramos, Marcelo; Modric, Kroos; James Rodríguez, Bale, Cristiano Ronaldo; y Benzema. Entrenador: Rafa Benítez.
Betis (4-4-2): Adán; Piccini, Pezzella, Bruno, Molinero; Álvaro Cejudo, Xavi Torres, N'Diaye, Vargas; Dani Ceballos y Rubén Castro. Entrenador: Pepe Mel.

Sustituciones:
Real Madrid: Benzema por Isco (52'); Kroos por Casemiro (63'); Modric por Kovacic (74').
Betis: Molinero por Jorge Molina (45'); Dani Ceballos por Digard (52'); N'Diaye por Petros (80').

Goles:
Real Madrid: Bale (2' y 88'), James Rodríguez (38' y 49') y Benzema (47').

Tarjetas amarillas:
Real Madrid: Kroos (23'), Varane (59') y Casemiro (85').
Betis: Vargas (28'), Molinero (37') y Xavi Torres (91').

Árbitro: Hernández Hernández. 

lunes, 24 de agosto de 2015

Un aguerrido Sporting frustra el debut de Benítez


Los sportinguistas, recién ascendidos a Primera División, festejaron el punto conseguido contra el Real Madrid como si de un título se tratase. Le jugaron de tú a tú al gigante blanco


El Sporting comenzó ayer una nueva aventura en la Liga BBVA y lo hizo de una manera prácticamente insuperable. En El Molinón y saliendo invicto contra el todopoderoso Real Madrid. La fe con la que salió al campo el conjunto rojiblanco resultó clave en el desenlace de un partido que es de los que se recuerda (para bien y para mal) a final de temporada. Un punto de oro para luchar desde el principio por la consecución de la permanencia.

Por su parte, el Real Madrid de Rafa Benítez inicia su camino repleto de dudas. Tras tres años sin ganar la Liga, los blancos deben recuperar el cetro del campeonato nacional con urgencia. Se finiquitó la etapa de Ancelotti quizá con excesiva premura y se trajo a un técnico que vino con el discurso bien aprendido: equilibrio pero jugando bien. Contra el Sporting, ni lo uno ni lo otro. El Madrid no fue capaz de imponerse con claridad a un equipo que militaba en Segunda la pasada campaña y concedió demasiadas oportunidades atrás.

Los veinte primeros minutos tuvieron un dueño y señor del encuentro. El Real Sporting fue infinitamente mejor que el Real Madrid. Su voracidad embotelló todo el juego en una mitad de campo que concluía en la portería defendida por Keylor Navas. La presión y el nivel físico exhibidos por los rojiblancos en pleno agosto son dignos de elogio. Mientras tanto, el Madrid fue incapaz de sacar el balón jugado y de superar las líneas del Sporting


Sólo con el paso de los minutos, cuando el cansancio hizo mella en los locales, el Madrid dominó por fin la pelota. Arriba Jesé, Bale y Cristiano intercambiaron constantemente sus posiciones como estaba previsto. Si la idea era desconcertar a la zaga rival, el plan no funcionó. Luka Modric fue el único con criterio ayer y un espectacular pase suyo cerca estuvo de costar un disgusto a los gijoneses. Gareth Bale recibió la asistencia del croata, se regateó a Cuéllar y erró el remate al escorarse demasiado. El galés, por cierto, completó una buena primera mitad. Más acertado que las pasadas temporadas y creando peligro cuando arrancaba desde la banda izquierda. En la segunda mitad fue de más a menos, pero de las cosas positivas de anoche para los blancos, una fue Bale.


En la segunda parte el Madrid apostó toda su suerte a Cristiano Ronaldo. Todos sus compañeros buscaron al luso y éste intentó hacer gol por activa y por pasiva. Cristiano se topó una y otra vez con un inspirado Cuéllar que paró todos sus remates. Estrada Fernández se tragó un penalti sobre el portugués y el Sporting se estrelló en el larguero blanco en un partido que finalizó con el resultado del inicio. Un triste 0-0 en el debut liguero de dos equipos con aspiraciones totalmente opuestas.

Este Real Madrid siembra dudas en sus primeros pasos. Incapaz de imponerse a un equipo recién ascendido, continúa con la pólvora mojada. Esta pretemporada ha marcado pocos tantos y con el primer partido de Liga se demuestra que es un escollo que ha de superar cuanto antes el equipo de Benítez: el gol. El balón no ha sino empezado a rodar pero son los tropiezos inesperados los que deciden los campeonatos. El Madrid terminó la Liga como empieza ésta: a dos puntos del Barça.

Ficha del partido:

Alineaciones:
Sporting (4-4-2): Cuéllar; Lora, Luis Hernández, Bernardo, Isma López; Carmona, Sergio Álvarez, Nacho Cases, Jony; Guerrero y Sanabria. Entrenador: Abelardo.
Real Madrid (4-2-3-1): Keylor Navas; Danilo, Varane, Sergio Ramos, Marcelo; Kroos, Modric; Isco, Bale, Cristiano Ronaldo; y Jesé. Entrenador: Rafa Benítez.

Sustituciones:
Sporting: Guerrero por Juan Muñiz (71'); Jony por Álex Menéndez (76'); Carmona por Rachid (85').
Real Madrid: Jesé por James Rodríguez (55'); Isco por Kovacic (70'); Danilo por Carvajal (83').

Tarjetas amarillas:
Sporting: Nacho Cases (35'); Carmona (65'); Jony (70'); y Sergio Álvarez (73').

Árbitro: Estrada Fernández.

martes, 18 de agosto de 2015

Rugido de campeón: los leones culminan su sequía


El Athlétic conquista la Supercopa de España y logra un título 31 años después. Por fin, tras cinco finales perdidas desde el 2009, los bilbaínos se sacan la espinita


Han tenido que transcurrir más de tres décadas para que el Athlétic volviese a levantar un título. Quién sabe qué habría sucedido con este club si, como Real Madrid y Barcelona, se hubiese puesto a fichar súperestrellas en vez de seguir su política de contar sólo con jugadores vascos. Lo cierto es, que a día de hoy, el Athlétic es el Supercampeón de España y lo ha conseguido barriendo en la final al Barça de Luis Enrique que venía de conseguir el "Triplete".


Es curioso que cuando más pesimismo había en Bilbao (ya estaban los aficionados hasta las narices de Messi y del Barcelona) el Athlétic se sacó un auténtico partidazo de la manga para humillar a los culés con un 4-0 en el Nuevo San Mamés. En Barcelona se habló tímidamente de la remontada, pero la idea se trasladó más a las redes sociales que al Camp Nou. La afición tenía el comportamiento típico de un encuentro amistoso y al Barcelona le faltó puntería en los primeros momentos del choque que fueron los únicos en los que estuvo volcado. 

El Athlétic puede sentirse orgulloso y sacar pecho de haber toreado al Barça en la ida y haber aguantado la vuelta en el Camp Nou sin mayores dificultades. El héroe de los rojiblancos tiene nombre y apellido: Aritz Aduriz. El ariete de los leones firmó un hattrick para la historia en la ida y marcó el tanto de la igualada (tras el gol de Messi al filo del descanso) en la vuelta, frustrando definitivamente las esperanzas azulgranas. Un póker de goles en la final que le aúpan a los altares del Athlétic y le hacen aporrear las puertas de la Selección española a sus 34 años.


Otro de los nombres propios es el de Gerrard Piqué. "Yo sí creo" era su mensaje en Twitter tras el 4-0 de la ida. Pues bien, ganando anoche su equipo 1-0, se autoexpulsó tras "cagarse en la puta madre" de uno de los asistentes. Quizás estuviese pensando en los de Madrid el central, que parece tenerlos siempre en su cabeza.


Los leones han finiquitado por fin una malísima racha en las finales y, también en las finales contra el F.C. Barcelona. Desde el 2009 habían disputado cinco, cuatro de ellas fueron contra los blaugranas, y no habían ganado ninguna. Tres de Copa del Rey y una de Supercopa de España (contra el Barça todas ellas) y una de Europa League contra el Atlético. Por fin, a la sexta, el Athlétic ha salido justo vencedor de una final que ha dominado de cabo a rabo. Ni apareció Messi en los 180 minutos de juego, mérito absoluto de la zaga de Valverde.


No es ninguno de los tres grandes títulos, pero todos ellos cuentan y no hay mejor manera de comenzar la temporada que con un nuevo trofeo en las vitrinas de tu estadio. Ésta es la segunda Supercopa de España que consigue el Athlétic, que ahora debe centrarse en eliminar al Zilina para poder estar en la fase de grupos de la Europa League. Quién sabe si este equipo ganará algún título más esta temporada.


miércoles, 12 de agosto de 2015

Pedro da la Supercopa de Europa al Barça


El Barcelona se impuso por 5-4 al Sevilla en la prórroga de una final épica. Los culés suman ya cinco Supercopas de Europa y son, junto al Milan, el equipo más laureado en esta competición



Nadie en el Boris Paichadze de Tiflis quedó decepcionado. Georgia tuvo la oportunidad de albergar un partido de fútbol de un nivel al que no acostumbra ese país. Frente a frente, el campeón de la Champions y el campeón de la Europa League. El Barcelona y el Sevilla escribieron otro capítulo más para la gloria del fútbol español, que desde el 2014 lo ha ganado todo a nivel de clubes.

La falta de ritmo y de forma física de ambas escuadras, lejos de significar un encuentro de menor calidad, propició que el espectáculo se instaurase sobre el terreno de juego y que los ataques mermasen a las defensas contrarias con un festival de goles. El Sevilla madrugó en el primer tanto, a lo que el Barcelona no tardó en responder con dos hachazos. Estos partidos no suelen ser excesivamente atractivos, son más un premio para los mejores equipos de la campaña anterior, sin embargo, el de este año mantuvo hasta el desenlace la emoción en todo lo alto.


No habían transcurrido ni tres minutos cuando Éver Banega dejó claro al Barcelona que no lo iba a tener fácil esa noche. El argentino transformó una falta desde la frontal ante la que nada pudo hacer Ter Stegen. Messi observó a su compatriota y consiguió silenciar a toda la afición sevillista cuando se cumplía el cuarto de hora de encuentro con dos réplicas insuperables. Con la pierna izquierda, de libre directo en ambas ocasiones, alojó el cuero en la escuadra izquierda de Beto. Messi puso por delante al Barcelona con dos ejecuciones de súperestrella y ridiculizó el inmejorable comienzo del Sevilla.


La cosa pintaba mal ya para el Sevilla que veía como el gigante Leo Messi emanaba sensación de peligro cuando la pelota acariciaba sus botas. Peor se puso cuando Rafinha, antes del descanso, hacía el 3-1 que parecía ya la estocada definitiva. Tras el descanso, los de Emery regresaron con valentía, quizá demasiada. El Barça aprovechó los huecos que aparecieron en el campo con la presión hispalense y Luis Suárez hizo el cuarto de la cuenta blaugrana.












El Sevilla, no obstante, no bajó los brazos y siguió con la misma intensidad. El Barça perdió la pelota por la relajación, la fuerza del Sevilla y la salida de Iniesta del campo. Reyes, inspirado y motivado desde el comienzo del choque, lideró a los suyos mientras permaneció en el campo y fue el primero en recortar distancias. La fe del Sevilla movió montañas y terminó por encontrarse con un penalti a favor que no perdonaría Gameiro.















El estadio era ya una olla en ebullición. Los culés miraban incrédulos el electrónico y se desesperaban por la lentitud de cada segundo, los sevillistas empujaban en volandas a los suyos en cada llegada al área, en cada balón cruzado, en cada ocasión. Así, en el minuto 80, el empate fue una realidad. Konoplyanka remató un balón en el segundo palo que finalmente forzó la prórroga.


Fue entonces cuando Luis Enrique se dio cuenta de que tenía a un campeón del mundo en el banquillo. Pedro, suplente pese a la baja de Neymar, entró en la prórroga para salvar los muebles a su equipo. Aún con el cansancio acumulado, y en pleno mes de agosto, los dos equipos se mostraron fieros en el tiempo extra. Los penaltis amenazaban ya en la segunda mitad de la prórroga por la falta de claridad de ideas, pero allí apareció Pedro. Chutó Messi tras el rechace de una falta que él mismo había ejecutado, Beto sacó una mano rescatadora y Pedro salió de la nada, como un auténtico ratón del área, y anotó el definitivo 5-4. Su celebración mostró la rabia contenida, pateó con furia el banderín del córner pensando que posiblemente ése era su último tanto como azulgrana, mas una cosa estaba clara: le había regalado al Barça su quinta Supercopa de Europa.



Ficha del partido:

Alineaciones:
Barcelona (4-3-3): Ter Stegen; Dani Alves, Piqué, Mascherano, Mathieu; Rakitic, Busquets, Iniesta; Messi, Luis Suárez y Rafinha. Entrenador: Luis Enrique.
Sevilla (4-2-3-1): Beto; Coke, Rami, Krychowiak, Trémoulinas; Krohn-Dehli, Éver Banega; Reyes, Iborra, Vitolo; y Gameiro. Entrenador: Unai Emery.

Sustituciones:
Barcelona: Iniesta por Sergi Roberto (62'); Rafinha por Marc Bartra (77'); Mascherano por Pedro (92').
Sevilla: Reyes por Konoplyanka (67'); Iborra por Mariano Ferreira (79'); Gameiro por Immobile (79').

Goles:
Barcelona: Messi (7' y 15'), Rafinha (43'), Luis Suárez (52') y Pedro (115').
Sevilla: Éver Banega (3'), Reyes (57'), Gameiro (72') y Konoplyanka (80').

Tarjetas amarillas:
Barcelona: Mathieu (70'); Pedro (93'); Busquets (116'); y Dani Alves (119').
Sevilla: Krychowiak (13'); Coke (87'); Éver Banega (90' + 1'); Immobile (91'); y Krohn-Dehli (119').

Árbitro: William Collum.